Categoría | Biografías, memorias, diarios |
ISBN | 9788493531386 |
Peso | 0.70 |
Idioma | Español |
Editorial | Atalanta |
Autor | Maltby, William |
Tapa | Cartoné |
Traductor | Rodríguez Halffter, Eva |
Edición | 2 |
Año | 2007 |
Ciudad | Girona |
Páginas | 492 |
`Ahora Jacobo Siruela, nieto del anterior, ha promovido la reedición de la obra de Maltby, excelente biografía de nuestro personaje.`
Ricardo García Cárcel. ABC de las Letras.
`Un trabajo muy bien informado que presenta al personaje de forma desapasionada, con sus luces y méritos -que fueron muchos- pero también con sus abundantes sombras`.
Luis Ribot. El cultural. El Mundo
`El acercamiento a la complejidad de su comportamiento y su carácter, la imagen poliédrica que traza Maltby de Alba es la mayor virtud de esta espléndida biografía y una invitación a evitar las simplificaciones y los tópicos.`
Santos Domínguez. En un bosque extranjero.
`Fue, sin duda, uno de los grandes hombres de su época, que ha visto manchada su reputación durante siglos cuando no era mucho peor que sus contemporáneos; antes bien, fue mucho mejor: más capaz, más justo y más virtuoso.`
Nuño Vallés. El confidencial
Fernando Álvarez de Toledo, III duque de Alba, fue uno de los personajes más poderosos y polémicos de su época. Guerrero por vocación, y cortesano y diplomático por necesidad, tomó parte en las cuestiones políticas y militares más relevantes del siglo XVI, aunque es conocido principalmente por sus seis trágicos años como gobernador de los Países Bajos, bajo el reinado de Felipe II. A pesar de su indudable importancia histórica, es su carácter lo que más fascinó y repelió a sus coetáneos y ha cautivado la imaginación de épocas posteriores.
William S. Maltby dedicó doce años de su vida a la investigación y redacción de este libro, que sigue siendo, sin lugar a dudas, el estudio histórico más completo y profundo que existe sobre su figura. Maltby ha sido el primer biógrafo e historiador en dibujar un retrato veraz del duque, con sus luces y sus sombras, sus logros y sus contradicciones. Sin eludir la penetración psicológica, el gran historiador norteamericano sitúa a su personaje dentro del complejo laberinto político de su época. Por todo ello, asistimos fascinados a un claro y detallado análisis de un siglo asombroso, en el que España alcanzó su cenit y el duque de Alba fue uno de sus símbolos más notorios.
PRÓLOGO: JACOBO SIRUELA