Aprender a amar es quizás uno de los más complejos logros de una persona a lo largo de su existencia.
Juan Carlos es heredero de una larga tradición en torno a este sentimiento intenso que parte de la propia insuficiencia. Los suspiros delatores y los latidos desbocados acompañan al adolescente Juan Carlos a lo largo de una trama envolvente que se vale tanto del deseo que surge del sueño como de las angustias y ansiedades propias de la vigilia. Alma de ganador es una novela intensa y apasionada, sobre una atracción adolescente que culmina en la adultez.
Esta historia demuestra que, a pesar de la desdicha, la soledad y el sufrimiento, el amor existe...y persiste.