ASTROFÍSICA PARA CHIC@S CON PRISA
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Categoría | A partir de 9-12 años |
ISBN | 9786077477242 |
Peso | 0.30 |
Idioma | Español |
Editorial | Paidós |
Autor | deGrasse Tyson, Neil |
Tapa | Rústica |
Año | 2019 |
Ciudad | Ciudad de México |
Páginas | 192 |
Desde que era niño, a Neil deGrasse Tyson le encantaba mirar las estrellas, así que para comprarse su primer telescopio se dedicó a pasear perros en el Bronx, el barrio de donde es originario. Su afán de conocimiento no se detuvo ahí: fue aumentando a medida que descubría nuevas cosas, como los anillos de Saturno o de dónde viene cada uno de los elementos de la tabla periódica. Y ese afán no se detiene, porque la astrofísica es una ciencia que todos los días descubre algo nuevo: un asteroide, un planeta, una galaxia. Lleno de anécdotas divertidas, Tyson explica con claridad qué son las estrellas enanas, los agujeros negros, los quasares y las posibilidades de que no estemos solos en el universo. También habla de la imposibilidad de viajar más rápido que la luz y de la esperanza de encontrar los agujeros de gusano, que nos permitirían conocer otros mundos. Desde que era niño, a Neil deGrasse Tyson le encantaba mirar las estrellas, así que para comprarse su primer telescopio se dedicó a pasear perros en el Bronx, el barrio de donde es originario. Su afán de conocimiento no se detuvo ahí: fue aumentando a medida que descubría nuevas cosas, como los anillos de Saturno o de dónde viene cada uno de los elementos de la tabla periódica. Y ese afán no se detiene, porque la astrofísica es una ciencia que todos los días descubre algo nuevo: un asteroide, un planeta, una galaxia.
Lleno de anécdotas divertidas, Tyson explica con claridad qué son las estrellas enanas, los agujeros negros, los quasares y las posibilidades de que no estemos solos en el universo. También habla de la imposibilidad de viajar más rápido que la luz y de la esperanza de encontrar los agujeros de gusano, que nos permitirían conocer otros mundos. Desde que era niño, a Neil deGrasse Tyson le encantaba mirar las estrellas, así que para comprarse su primer telescopio se dedicó a pasear perros en el Bronx, el barrio de donde es originario. Su afán de conocimiento no se detuvo ahí: fue aumentando a medida que descubría nuevas cosas, como los anillos de Saturno o de dónde viene cada uno de los elementos de la tabla periódica. Y ese afán no se detiene, porque la astrofísica es una ciencia que todos los días descubre algo nuevo: un asteroide, un planeta, una galaxia. Lleno de anécdotas divertidas, Tyson explica con claridad qué son las estrellas enanas, los agujeros negros, los quasares y las posibilidades de que no estemos solos en el universo. También habla de la imposibilidad de viajar más rápido que la luz y de la esperanza de encontrar los agujeros de gusano, que nos permitirían conocer otros mundos.